EVALUACION MORFOFUNCIONAL:
Esta consiste en determinar las características morfológicas y evaluar la capacidad física de cada atleta. Tiene como fin evaluar el estado morfo-funcional de cada atleta y así ofrecer, las recomendaciones necesarias en la optimización del rendimiento deportivo.
Medir una serie de parámetros kinantopométricos (peso, talla, pliegues circunferencia) en la determinación de la composición corporal (tejido graso y magro), constitución corporal o somatotipo (endomorfico, exomorfico, mesomórfico) y control de peso.
Todas estas cualidades del ejercicio físico aplicado racional, dosificado y científicamente diseñado permiten desde muy temprana edad desarrollar durante el crecimiento características funcionales protectoras y preventivas en salud.
PUNTOS A TOMAR EN CUENTA PARA REALIZAR UNA EVALUACION MORFOFUNCIONAL
Historia médico deportivo
Valoración odontológica
Encuesta nutriciona
Pruebas bioquímica
Estudio ECG y espirometría
Antropometría
Ergometría
TEST DE RUFFIER‐DICKSON
Método: 30 flexiones de rodillas, durante 45 seg. tomando como
referencia una silla y hacer ligero contacto al asiento con los glúteos
Frecuencia de ejecución de 80 veces por minuto
I= (PO+`P1+P2) – 200/10
PO = Pulso en reposo o estado basal durante 1 minuto
P1 = Pulso al finalizar las 30 flexiones
P2 = Pulso al minuto de finalizada la toma anterior
Valoración:
Menor de 1 = muy bien
1 a 5 = bueno
5 a 10 = mediano
10 a 20 = malo
+ de 20 = sospechoso de patología
Frecuencia de ejecución de 80 veces por minuto
I= (PO+`P1+P2) – 200/10
PO = Pulso en reposo o estado basal durante 1 minuto
P1 = Pulso al finalizar las 30 flexiones
P2 = Pulso al minuto de finalizada la toma anterior
Valoración:
Menor de 1 = muy bien
1 a 5 = bueno
5 a 10 = mediano
10 a 20 = malo
+ de 20 = sospechoso de patología
CONCEPTO DE EVALUACION:
La evaluación es un proceso que procura determinar, de la manera más sistemática y objetiva posible, la pertinencia, eficacia, eficiencia e impacto de las actividades formativas a la luz de los objetivos específicos. Constituye una herramienta administrativa de aprendizaje y un proceso organizativo orientado a la acción para mejorar tanto las actividades en marcha, como la planificación, programación y toma de decisiones futuras.
Lo que no debe hacer la evaluación es categorizar. La categorización del conocimiento impide reconocer de manera efectiva el avance en el proceso de enseñanza-aprendizaje, al enmarcar por episodios la capacidad intelectual del aprendiz. Tampoco debe generalizar. Así como todo conocimiento es diferente, todo proceso que conlleva a él es diferente de persona a persona, es decir, todos aprendemos de manera diferente, no debemos generalizar, aunque sí establecer criterios. Tampoco es calificar: asignar a un número no significa conocimiento, entonces, evaluar no es calificar.
La evaluación nos ayuda a medir los conocimientos adquiridos, y nos proporciona información de los avances de los mismos con la finalidad de conocer si se están cumpliendo o no los objetivos propuestos.[2] La evaluación en tecnologías es sistemática y constante no se debe evaluar por el proyecto terminado sino por el esfuerzo realizado y en un mayor concepto las competencias que se adquieren.
La evaluación puede conceptualizarse como un proceso dinámico, continuo y sistemático, enfocado hacia los cambios de las conductas y rendimientos, mediante el cual verificamos los logros adquiridos en función de los objetivos propuestos. Y es éste para el docente el perfeccionamiento de su razón de ser.
TIPOS DE EVALUACION:
Evaluación continua: pretende superar la relación evaluación-examen o evaluación-calificación final de los alumnos, y centra la atención en otros aspectos que se consideran de interés para la mejora del proceso educativo. Por eso, la evaluación continua se realiza a lo largo de todo el proceso de aprendizaje de los alumnos y pretende describir e interpretar, no tanto medir y clasificar.
Evaluación criterial: A lo largo del proceso de aprendizaje, la evaluación criterial compara el progreso del alumno en relación con metas graduales establecidas previamente a partir de la situación inicial. Por tanto, fija la atención en el progreso personal del alumno, dejando de lado la comparación con la situación en que se encuentran sus compañeros.
Evaluación formativa: Recalca el carácter educativo y orientador propio de la evaluación. Se refiere a todo el proceso de aprendizaje de los alumnos, desde la fase de detección de las necesidades hasta el momento de la evaluación final o sumativa. Tiene una función de diagnóstico en las fases iniciales del proceso, y de orientación a lo largo de todo el proceso e incluso en la fase final, cuando el análisis de los resultados alcanzados tiene que proporcionar pistas para la reorientación de todos los elementos que han intervenido en él.
Evaluación global: Considera comprensivamente todos los elementos y procesos que están relacionados con aquello que es objeto de evaluación. Si se trata de la evaluación del proceso de aprendizaje de los alumnos, la evaluación global fija la atención en el conjunto de las áreas y, en particular, en los diferentes tipos de contenidos de enseñanza (hechos, conceptos y sistemas conceptuales; procedimientos; actitudes, valores y normas).
Evaluación inicial: Se realiza al iniciarse cada una de las fases de aprendizaje, y tiene la finalidad de proporcionar información sobre los conocimientos previos de los alumnos para decidir el nivel en que hay que desarrollar los nuevos contenidos de enseñanza y las relaciones que deben establecerse entre ellos. También puede tener una función motivadora, en la medida en que ayuda a conocer las posibilidades que ofrecen los nuevos aprendizajes.
Evaluación integradora: Referida a la evaluación del aprendizaje de los alumnos en la etapa de Educación Secundaria Obligatoria, comporta valorar globalmente el trabajo realizado en todas las áreas y el grado en que, con este trabajo se han alcanzado los objetivos generales de la etapa. Por tanto, en última instancia no se exige que se alcancen los objetivos propios de todas y cada una de las áreas.
Evaluación normativa: Usa estrategias basadas en normas estadísticas o en pautas de normalidad, y pretende determinar el lugar que el alumno ocupa en relación con el rendimiento de los alumnos de un grupo que han sido sometidos a pruebas de este tipo. Las pruebas de carácter normativo pueden ser útiles para clasificar y seleccionar a los alumnos según sus aptitudes, pero no para apreciar el progreso de un alumno según sus propias capaciades.
Evaluación cualitativa: Describe e interpreta los procesos que tienen lugar en el entorno educativo considerando todos los elementos que intervienen en él, subrayando la importancia de las situaciones que se crean en el aula. Es decir, fija más la atención en la calidad de las situaciones educativas creadas que en la cantidad de los resultados obtenidos.
Evaluación sumativa: Su objeto es conocer y valorar los resultados conseguidos por el alumno al finalizar el proceso de enseñanza-aprendizaje. Así considerada recibe también el nombre de evaluación final.
EVALUACION NEUROMUSCULAR:
El sistema neuromuscular se compone del sistema nervioso y el sistema musculoesquelético.
Bajo este tópico se cubriran conceptos introductorios al estudio sobre la estructura y función básica del sistema nervioso, el control nervioso del movimiento humano, la estructura y función básica del sistema muscular, la función del sistema musculoesquelético durante el ejercicio y el desarrollo muscular.